Barcelona: 10 lugares que no te puedes perder en esta ciudad española

Barcelona es la segunda ciudad más importante de España, que no solo sorprende por su imponente belleza arquitectónica, sino también por su gastronomía y así lo mostró la conductora de Sabe a Perú, Arlette Euler,  en su reciente visita a esta ciudad catalana.

 

Por ello, si está en tus planes conocer esta ciudad, a continuación te diremos qué lugares no debes dejar de conocer:

 

Sagrada Familia 

 

La original “Catedral del siglo XX” es la obra inconclusa del arquitecto Antonio Gaudí, quien cogió las riendas de la construcción de esta iglesia en 1883, dejando a su muerte, en 1926, todos los planos para que futuros arquitectos puedan finalizar la obra. Se espera que su construcción finalice en 2026, tan solo 144 años después.

 

Esta edificación es el emblema de la ciudad y el monumento más visitado de Barcelona.

 

En el exterior destacan las 3 fachadas dedicadas al Nacimiento, Pasión y Gloria de Jesús y las torres que llegarán hasta los 172 metros cuando se termine el monumento, con lo cual se convertirá en la iglesia cristiana más alta del mundo.

 

Hasta el momento han sido erigidas 8 de las 18 torres diseñadas por Gaudí. El arquitecto decidió que doce de ellas fueran dedicadas a los Apóstoles, cuatro a los Evangelistas, una a María y otra a Jesús. Cada una de ellas estará dotada de diferente altura en función de la jerarquía religiosa que representan.

 

Además, la basílica tiene 3 simbólicas fachadas: una dedicada al nacimiento de Cristo, otra a la Pasión y la principal, que representa la muerte, juicio final, gloria e infierno.

 

En el interior, destacan sus columnas de tronco de árbol que convierten el interior del templo en un enorme bosque de piedra.

 

Catedral Basílica Metropolitana

 

La Catedral de la Santa Cruz y Santa Eulalia de Barcelona se encuentra en el Barrio Gótico y es uno de los más especiales de la ciudad. El templo tiene un gran carácter y personalidad, destacando entre otras muchas catedrales que hayas visto con anterioridad.

 

Se construyó durante los siglos XIII a XV sobre la antigua catedral románica, construida a su vez sobre una iglesia de la época visigoda a la que precedió una basílica paleocristiana, cuyos restos pueden verse en el subsuelo, en el Museo de Historia de la Ciudad.

 

La cripta de Santa Eulalia, las capillas del Santo Cristo de Lepanto y de Santa Lucía, y el coro de madera tallada será lo primero que vean los visitantes al llegar. Su claustro fue terminado en el siglo XV, posee un amplio estanque lleno de plantas, en el que habitan 13 ocas que recuerdan la edad a la que murió Santa Eulalia defendiendo su fe cristiana.

 

Plaza Real

 

Está ubicada muy cerca de La Rambla y el Barrio Gótico y se caracteriza por sus bares, música y gastronomía. Fue diseñado por el arquitecto Francesc Daniel Molina Casamajó, el cual mantienen el estilo de las tradicionales plazas mayores españolas.

 

En el centro de este espacio se encuentra la Fuente de las Tres Gracias, antes de esta se encontraba una estatua de Fernando el Católico, pero fue destrozada a pedradas.

 

Las farolas de la plaza fueron diseñadas por Antonio Gaudí, cuando aún no era conocido.

 

Es escenario de representaciones teatrales, bailes y conciertos. Este espíritu polifacético la convierte, sin duda, en el rincón con más personalidad de La Rambla. escenario de representaciones teatrales, bailes y conciertos. Este espíritu polifacético la convierte, sin duda, en el rincón con más personalidad de La Rambla.

 

Está rodeada por edificios porchados, en la actualidad la plaza es peatonal y solo se puede acceder caminando desde la Rambla o por los siete pasajes que desembocan en ella.

 

La Rambla

 

Es una avenida de un kilómetro y medio que va desde la Plaza Cataluña hasta el Monumento de Colón, es uno de los espacios indiscutiblemente fijo para los turista.

 

Este espacio se caracteriza por sus kioskos de prensa, flores, actores callejeros, cafeterías, restaurantes y comercios.

 

Si visitas esta zona de la ciudad, es recomendable sentarse en alguna de las terrazas para comer o beber algo.

 

Cerca a esta avenida se encuentran los principales atractivos turísticos de la ciudad, como el Mercado de San José, la Plaza Real, Palau Güell, el Museo Marítimo, la Catedral de Barcelona, entre otros.

 

Mercado de San José o La Boquería

 

Ocupa una superficie de 2.500 metros cuadrados y conserva la misma cubierta de hierro desde 1914. Es el mercado por excelencia de Barcelona y punto fijo de visita de turistas.

 

Entre el animado ambiente de los puestos que ofrecen todo tipo de alimentos, incluso menús ya preparados para degustar los productos típicos de la zona, donde se conjuga perfectamente la gastronomía y productos gourmet.

 

Se sitúa en el corazón de la Rambla y es el más grande de cataluña, cuenta con más de 300 puestos con todo tipo de productos locales e internacionales, que ofrecen alimentos exóticos y llevarte platos preparados con los productos a casa.

 

Park Güell

 

Es uno de los parques más bonitos de Barcelona compuesto por jardines y elementos arquitectónicos situado en la parte superior de la ciudad catalana, si bien en un inicio se ideó la construcción de un conjunto residencial de lujo, con el paso de los años fue abandonada y convertido en un digno escenario de un cuento.

 

Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1984, y es otra de las geniales obras de Gaudí. En el recinto del parque se encuentra la Casa Museo Gaudí, en la que residió el arquitecto entre 1906 y 1925, donde en la actualidad se expone una colección de obras del arquitecto.

 

El parque está compuesto por esculturas, fuentes y edificios inspirados en las formas onduladas de la naturaleza, siendo la imagen más famosa la escalinata del Dragón, una gran escalera con una fuente y la famosa escultura del dragón.

 

Otros rincones interesantes del parque son la Sala Hipóstila, la Casa del Guarda, el Pórtico de la Lavandera y los Jardines de Austria.

 

Casa Batlló

 

Es la obra más representativa del modernismo catalán y una de las obras maestras de Antonio Gaudí, el representante más importante de la arquitectura española, quien si bien no la construyó la remodeló tal como se ve hoy en día.

 

Conocida popularmente como la casa de los huesos por su singular composición llena de fantasía y color, la cual simboliza la combinación ideal entre el arte y la funcionalidad, entre la arquitectura y el diseño.

 

Además de su fachada inspirada en las formas orgánicas de la naturaleza, su interior está llena de magia y fantasía a través de sus formas onduladas, el patio de luces y la azotea llena de chimeneas sorprendentes

 

En el primer piso, se encuentra la planta noble, antigua vivienda de la familia Batlló donde destaca el salón principal, un espacio lleno de luz y de formas sinuosas con vistas al Passeig de Gracia.

 

Sobre este piso principal, el edificio dedicaba cuatro pisos al alquiler y un quinto donde se proyectaron el ático, como zona para el servicio, y los trasteros. Un espacio muy sugerente, evocador y de máxima pureza conformado por una sucesión de arcos catenarios que trasladan al visitante al vientre del dragón.

 

Dos escaleras de caracol permiten el acceso desde el ático a la terraza donde, imponentes y sorprendentes chimeneas agrupadas, fueron ornamentadas perfectamente con trencadís vidriado y de color. La azotea de la Casa Batlló es una de las más espectaculares creaciones de la plástica gaudiniana.Construida sobre los arcos parabólicos del desván, es un espacio rectangular dividido en su centro por las linternas de los patios interiores.

 

Casa Milà

 

Fue construida entre 1906 y 1912 y es conocida popularmente La Pedrera por su fachada de piedra formada por arcos ondulados.

 

Se encuentra en el Paseo de de Gràcia con la calle Provenza y es otra de las famosas obras del famoso Gaudí, perteneciente a su etapa naturalistas, periodo en el que el arquitecto perfecciona su estilo personal, inspirado en las formas orgánicas de la naturaleza, donde se muestra la gran libertad creativa e imaginativa ornamental del artista catalán.

 

Es uno de los 10 lugares más visitados de Barcelona, no solo por su fachada, sino también por su interior. Aunque lo mejor está en la azotea, donde unas chimeneas en forma de guerreros sorprenden a los visitantes, además de poder ver el centro de la ciudad desde las alturas, lo cual es todo un espectáculo en especial de noche, donde además se incluye un espectáculo audiovisual.

 

Playa Barceloneta